“Es una isla con playas extraordinariamente bellas. La arena es de coralina, pese a las altas temperaturas, la arena no se calienta. Además, los residuos oceánicos no llegan a las playas de La Tortuga como ocurre en Aruba, y el potencial en submarinismo es extraordinario”.
Así lo refirió Alí Padrón, jefe de la Zona Económica Especial de La Tortuga, al tiempo que destacó el potencial que representa esta isla para el desarrollo turístico.
Manifestó que uno de los objetivos en la isla es un desarrollo turístico sostenible, que comprenda un proyecto regenerativo, donde la presencia humana “no va a destruir el medio ambiente, sino a regenerarlo”, a diferencia de la pretendida privatización que se quiso hacer en los años 70, enfatizó Padrón.
Con relación a las zonas económicas especiales, refirió que:
«Son una particularidad única para el desarrollo, las cuales permiten promocionar las exportaciones, sustituir las importaciones, aprovechar las ventajas comparativas que tiene el país y el desarrollo de las ventajas competitivas”.
Finalmente, indicó que la Tortuga es una zona geográfica muy prometedora para la inversión turística del sector privado y público, que permitirá el desarrollo y máximo aprovechamiento de ese territorio y el impulso del motor turismo.
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