Un niño iraní de solo dos años permanece en coma luego que un hombre judío lo arrojara violentamente al suelo en el aeropuerto de Moscú. Las autoridades rusas arrestaron al atacante y lo acusan de intento de homicidio.
El agresor levantó al niño por el torso y lo lanzó con fuerza al suelo frente a su madre y otros pasajeros. Las cámaras de seguridad grabaron el momento. El menor recibió atención médica urgente y fue llevado a un hospital en Moscú, donde ahora permanece en cuidados intensivos.
La madre del niño salió de Irán hace pocos días con su hijo, buscando escapar de los bombardeos en su país. La ruta a través de Rusia se ha consolidado como una opción para miles de civiles que quieren huir de la violencia en Irán y en la región.
Aunque Irán e Israel anunciaron un alto al fuego, las tensiones diplomáticas persisten, y muchos civiles siguen enfrentando peligros en sus caminos de exilio. La guerra continúa causando desplazamientos y sufrimiento en toda la zona.
Este caso destaca cómo la guerra afecta también a los más vulnerables. Organizaciones de derechos humanos condenaron el ataque y advirtieron que muestra el aumento del discurso antiinmigrante y la deshumanización de los refugiados en estos tiempos difíciles.
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