Cada 14 de enero, miles de devotos de la Virgen de La Divina Pastora celebran con fervor y devoción la tradicional procesión que une a los feligreses de Venezuela y el mundo, en honor a la excelsa patrona del estado Lara.

Con motivo de su visita número 167, la periodista de 360, Lorena Arismendi, nos trajo la cobertura de la celebración en la que más de dos millones de personas recorren los 7.5 kilómetros que separan el pueblo de Santa Rosa de la Catedral de Barquisimeto, llevando consigo promesas, oraciones y esperanza.

Divina Pastora

Voces de devoción

 

Ireli Sánchez, una de las devotas presentes, expresó sus sentimientos sobre la celebración: «La Divina Pastora para mi, es vida, es alegría. Hoy estoy aquí cumpliendo con las promesas que le hice cuando mi hija convulsionó hace dos años, gracias a Dios está bien. Vengo también porque mi primo sufre de deficiencia renal y me pidió que pagara la promesa cuando llegáramos a la procesión». Este testimonio refleja la profunda conexión personal que muchos tienen con la Virgen, transformando la fe en gestos de gratitud y esperanza.

Luis Alberto Yarbe, quien lleva 15 años cumpliendo promesas, también compartió su experiencia: «Me sacó de la masacre de Uribana. Todavía estoy aquí pagando lo que pueda». Su relato ilustra el impacto significativo que la figura de La Divina Pastora tiene en la vida de muchos, convirtiéndose en un símbolo de protección y amparo ante las adversidades.

 

Divina Pastora

 

En este día miles de devotos de la Virgen de La Divina Pastora celebran con fervor y devoción la tradicional procesión que une a los feligreses de Venezuela y el mundo, en honor a la excelsa patrona del estado Lara. Con motivo de su visita número 167, más de dos millones de personas recorren los 7.5 kilómetros que separan el pueblo de Santa Rosa de la Catedral de Barquisimeto, llevando consigo promesas, oraciones y esperanza.

 

Unidad popular

 

El gobernador del Estado Lara, Adolfo Pereira, resaltó la trascendencia de este evento para la región y el país. “Hemos vivido una procesión espectacular, con una gran participación de feligreses tanto locales como internacionales. Este evento es una manifestación de fe que nos llena de esperanza y nos une como pueblo”, señaló. Pereira también destacó la importancia del Monumento del Manto de la Divina Pastora, inaugurado en 2016, como un símbolo de la devoción y la identidad del estado Lara.

La celebración se llevó a cabo en un ambiente de paz y festividad, con cantos y danzas que resonaban a lo largo del recorrido. «La unión del pueblo venezolano es evidente, y nos alegra que la Divina Pastora siga siendo un faro de esperanza y unidad entre las personas», añadió el gobernador.

 

Un pilar de identidad cultural

 

La festividad de La Divina Pastora no solo representa una profunda tradición religiosa, sino que también se erige como un pilar fundamental de la cultura venezolana. La imagen de la Virgen, que fue trasladada desde Sevilla, España, a Venezuela, es hoy un símbolo de la identidad y fe de millones. La procesión de este año, la número 167, reafirma el compromiso de los venezolanos con la paz y su fe en tiempos difíciles.

Con la oración y la devoción, los feligreses han expresado su amor hacia La Divina Pastora, culminando la jornada con la tradicional misa en la Catedral, donde renovaron su compromiso de fe y comunidad. La Divina Pastora, en su papel de madre, sigue siendo un consuelo y esperanza para todos aquellos que la veneran, uniendo corazones a través de la fe y la tradición.

360°/AR/OBP