El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, aseguró que la compañía continúa en conversaciones “francas, abiertas y sinceras” con el gobierno de Estados Unidos, presidido por Donald Trump, para garantizar la continuidad de sus operaciones energéticas en Venezuela.
Durante una intervención difundida por Europa Press, Imaz destacó que Repsol mantiene sus actividades tanto en el sector petrolero como en el gasífero dentro del país caribeño. Subrayó que el 85% de su posición en Venezuela corresponde a producción de gas, la cual desempeña un rol clave en el sostenimiento del sistema eléctrico venezolano.
“Hoy operamos con respeto a la legalidad venezolana y a la legalidad internacional, incluida la de Estados Unidos”, afirmó el ejecutivo, quien reafirmó la intención de la empresa no solo de permanecer en Venezuela, sino de seguir generando valor dentro del marco legal vigente.
Repsol participa actualmente en proyectos como Cardón IV y Petroquiriquire, a través de empresas mixtas que han permitido a la firma española consolidar su presencia en el país sudamericano incluso en contextos geopolíticos complejos.
La declaración de Imaz se produce en un momento en que las empresas internacionales evalúan con cautela sus vínculos con Venezuela, ante la reconfiguración de relaciones entre Caracas y Washington bajo la nueva administración estadounidense. Sin embargo, Repsol apuesta por el diálogo institucional y el respeto normativo como vía para asegurar estabilidad y continuidad operativa.
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