La República Bolivariana de Venezuela expresó a través de un comunicado su firme rechazo a las recientes sanciones impuestas por el gobierno canadiense a funcionarios venezolanos. Este movimiento, considerado por el gobierno venezolano como un intento patético de alinearse con los intereses de Estados Unidos, evidencia la falta de soberanía del país norteamericano, que parece haber asumido un rol subordinado en la política internacional.
El ejecutivo venezolano critica la decisión de Canadá de seguir una agenda hostil en relación con Venezuela, considerándola una manifestación de sumisión ante las presiones externas. Estas sanciones, según Venezuela, no solo carecen de fundamento, sino que buscan agradar a potencias ajenas sin tener en cuenta el clamor de los pueblos que defienden su autodeterminación.
Asimismo, reafirma que no reconocerá estas medidas injustas y se reserva el derecho de implementar acciones en respuesta a las decisiones de aquellos funcionarios que han actuado en este sentido.
A pesar de los intentos de agresión, Venezuela se mantiene en su postura de resistencia y defensa de su soberanía, comprometida a luchar por la dignidad y el respeto que corresponden a todos los pueblos libres y soberanos.
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