Durante la época navideña, es común que las personas ganen peso, incluso si la cantidad parece pequeña. Sin embargo, con el tiempo, estos aumentos pueden acumularse y generar problemas de salud. ¡No dejes que los excesos te afecten! La actividad física se presenta como una solución eficaz para contrarrestar los excesos de la Navidad.
¿Por qué es importante ejercitarse?
Estudios revelan que la disminución de la actividad física en diciembre, llena de dulces, comidas y bebidas, provoca un desequilibrio que impacta negativamente en:
- Metabolismo
- Digestión
- Niveles de energía
Incorporar ejercicio, como caminar, andar en bicicleta o jugar, fomenta lo que se denomina “la cultura de la vida”, basada en ejercicio, nutrición y sueño.
Riesgos de la inactividad
La acumulación de grasa, especialmente en el abdomen, está asociada con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares y metabólicas. Además, el ejercicio, ya sea moderado o intenso, mejora:
- Estado de ánimo
- Combate el estrés.
- Favorece el aprendizaje y la memoria.
Plan de acción en Navidad
¡No es necesario esperar hasta el 1º de enero para comenzar a moverte! Aquí hay algunas opciones simples que puedes integrar en tu rutina diaria durante las festividades:
- Caminatas en familia: Aprovecha las reuniones familiares para dar paseos al aire libre.
- Bailar: Las fiestas son una excelente oportunidad para moverte al ritmo de la música.
- Entrenamientos breves en casa: Realiza rutinas de 20 minutos que combinen ejercicios cardiovasculares y de fuerza, ideales para quienes disponen de poco tiempo.
Incorporar estas actividades no solo ayuda a mantener un peso saludable, sino que también promueve un estilo de vida activo y equilibrado durante la Navidad.
Con información de: MINCYT.
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