El presidente Nicolás Maduro, mediante una llamada telefónica, se dirigió a las familias de los migrantes que protestaron contra las acciones de Donald Trump y Nayib Bukele. Esto se produjo tras la deportación de venezolanos a El Salvador, acusados de pertenecer al grupo delictivo Tren de Aragua.
«Ustedes saben que lo vamos a hacer con el favor de Dios y el apoyo de todos. Se hará todo lo que haya que hacer para rescatar a los jóvenes que no son delincuentes, que son inocentes, que fueron secuestrados sin derecho a la defensa, sin condena», afirmó Maduro.
Dignidad del pueblo venezolano
El mandatario mencionó las palabras del padre de un joven de Valencia. Destacó cómo la dignidad del pueblo venezolano se reflejó en la movilización.
«El pueblo está en las calles expresando su verdad y su indignación», subrayó. Reiteró que el gobierno venezolano hará todo lo posible para exigir el regreso de los venezolanos «que no cometieron ningún delito ni en El Salvador ni en EE.UU. No les han dado el derecho a la defensa ni al debido proceso, violando todas las leyes de los derechos humanos y del derecho internacional. Basta de esta salvajada. Todo mi amor y todo mi compromiso a sus familiares», añadió durante su mensaje.
El Jefe de Estado aseguró que todos estos venezolanos en el extranjero regresarían al país gracias a la colaboración de naciones aliadas.
Conflicto legal en EE. UU.
El presidente estadounidense Donald Trump, en una proclamación del sábado, invocó la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798. Esto le permitió acelerar la deportación de quienes, según la Casa Blanca, eran parte de la banda criminal conocida como Tren de Aragua, desmantelada por las autoridades venezolanas.
El gobierno de Trump utilizó esta autoridad para deportar venezolanos a El Salvador, a pesar de la orden de un juez que suspendía estas deportaciones. Este hecho generó un conflicto legal.
360°/AR/CV
