El gobierno de Irán informó que, tras los recientes bombardeos de Estados Unidos e Israel, han fallecido 935 personas, incluyendo 140 mujeres y niños, y más de 5.600 han resultado heridas. Además, los ataques destruyeron aproximadamente 3.500 viviendas, muchas en Teherán, afectando también a familias enteras.
Fatemah Mohajerani, portavoz del gobierno, confirmó que las instalaciones nucleares del país sufrieron daños importantes y que las Fuerzas Armadas están en preparación para responder a cualquier agresión que atente contra la seguridad nacional.
En cuanto a la diplomacia, Irán mantiene que está evaluando la reanudación de negociaciones, aunque aún no hay una decisión concreta. La vocera subrayó que Irán no permitirá que los ataques afecten la autoridad del Líder Supremo ni la cohesión de la República Islámica.
Respecto a la cooperación con la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), Mohajerani explicó que la suspensión es legal y se tomarán las medidas que se consideren necesarias en defensa de sus intereses.
Por último, el gobierno iraní afirmó su compromiso con la vía diplomática y aseguró que siempre cumple sus obligaciones, en contraste con quienes violan acuerdos, confiando en que la paz y el diálogo son caminos esenciales para resolver sus desafíos.
Fuente: Al Mayadeen Español
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