En medio de los preparativos para el cónclave que definirá al próximo Papa, el cardenal peruano Juan Luis Cipriani ha generado polémica al hacerse presente en los actos fúnebres del Papa Francisco, pese a enfrentar una sanción impuesta por el Vaticano.
El pasado enero, Matteo Bruni, director de la Oficina de Prensa del Vaticano, confirmó que sobre Cipriani recae un precepto penal que restringe su actividad pública debido a acusaciones de pederastia. Estas restricciones incluyen la prohibición de participar en eventos eclesiásticos sin permiso, el impedimento de residir en Perú y la prohibición de usar insignias clericales.
La aparición del arzobispo en el Vaticano, vestido con los atributos propios de su investidura, ha levantado fuertes críticas. Medios aseguran que incluso estaría participando en reuniones previas al cónclave con la intención de «influir» en la elección papal.
Organizaciones como la Red de Sobrevivientes de Perú expresaron su rechazo ante la situación. “Cipriani y los cardenales que se lo permiten revictimizan a la víctima denunciante”, afirmó el grupo.
Y advirtieron: “Si la Iglesia católica quiere seguir en el sendero de tolerancia cero a la violencia sexual contra menores planteada por el papa Francisco, ello es un preocupante mensaje que afecta la confianza en los criterios de elección del próximo pontífice”.
Fuente: Venezuela News
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