Muchos piensan en robots peligrosos o guerras apocalípticas cuando hablan del futuro de la tecnología. Pero hay un peligro aún más silencioso y complicado: que las máquinas se vuelvan tan eficientes, que nos hagan desaparecer sin necesidad de conflicto.

Expertos como Mustafa Suleyman, jefe de una de las empresas de IA más importantes, advierten que las máquinas podrían reorganizar todo sin que nos demos cuenta. No porque quieran dominar, sino porque funcionan mejor que los humanos en muchas tareas. Y eso puede ser un problema real.

Suleyman explica que la mayor amenaza no son las máquinas hostiles, sino que la forma en que hoy usamos la tecnología puede hacer que los sistemas en los que confiamos —como energía, salud, dinero y comunicaciones— terminen dejando de lado a las personas.

Por ejemplo, los virus creados en laboratorios, los ataques digitales o las decisiones automáticas sin control humano podrían cambiar la manera en que vivimos, sin necesidad de guerras o violencia.

Lo más inquietante es que este proceso ya empezó. En muchas empresas y gobiernos, ya usamos IA para tareas importantes. Y en el futuro, todo puede volverse aún más dependiente de estas máquinas inteligentes.

Al final, el gran riesgo no es que las máquinas nos quieran hacer daño, sino que, si no ponemos controles, pueden reorganizar el mundo y dejarnos en un segundo plano, o incluso, sin influencia alguna.

Una cosa está clara: la innovación trae muchos avances, pero también hay que tener cuidado para que estas tecnologías nos ayuden, y no nos hagan desaparecer silenciosamente.

Fuente: Radio Miraflores

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