Los incendios forestales en Jerusalén se intensifican, obligando a las autoridades a evacuar a más de 8,000 personas y a pedir ayuda internacional para controlar la emergencia.
El fuego comenzó el miércoles por la mañana en varias zonas boscosas. Hasta ahora, las llamas han quemado unas 2,000 hectáreas en áreas cercanas a Jerusalén.
Los equipos de bomberos trabajan sin descanso con 76 unidades, incluyendo cuatro aviones de extinción y 40 vehículos todoterreno, en zonas como Latrun, Burma Road, Eshtaol, Park Canadá y otros sectores.
El Ministerio de Asuntos Exteriores pide ayuda del extranjero, y representantes de Italia y Chipre ya entregaron aviones. España también planea enviar aeronaves para apoyar las labores. Hasta ahora, los bomberos no reportan víctimas mortales, aunque 20 resultaron heridos, de los cuales 18 ya regresaron a sus tareas.
Las autoridades arrestaron a 18 personas sospechosas de estar implicadas en los incendios, aunque todavía trabajan para determinar las causas exactas. El primer ministro Benjamin Netanyahu afirma que las autoridades aún no confirman quién pudo haber iniciado las llamas.
Las personas evacuadas pueden volver a sus hogares en las próximas horas, mientras los bomberos continúan apagando los focos activos en diferentes zonas. La situación representa uno de los peores incendios en Israel en los últimos años y moviliza esfuerzos internacionales para controlar la crisis.
Fuente: Medios Internacionales
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