Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) atacaron múltiples blancos en el suburbio Dahiye, en Beirut, alegando que pertenecen a la unidad aérea del movimiento Hezbolá. A través de sus redes sociales, los militares informaron que apuntaron a instalaciones vinculadas a la producción de drones.
Según las FDI, Hezbolá «enterró plantas de producción de drones en el corazón de un barrio civil en Dahiye, Beirut, pensando que podrían ocultarlas y romper las reglas sin ser detectados». Añadieron que descubrieron el plan y advirtieron: «y pronto ya no estarán allí».
Diversas fuentes aún no confirman de forma independiente la versión israelí, lo que alimenta dudas sobre su credibilidad, especialmente después de varios ataques previos que se consideraron injustificados.
A pesar de los acuerdos entre ambos países, Israel sostiene que la unidad aérea de Hezbolá continúa fabricando miles de drones con fines militares. «Para la próxima guerra», aseguran en su comunicado.
Además, los militares pidieron a los habitantes de Ain Qana —en el sur del Líbano— que evacúen sus hogares «de su seguridad y la de sus familias». La advertencia apunta a dos edificios específicos que Israel planea bombardear y que aparecen señalados en un mapa difundido junto con la advertencia. Las autoridades recomiendan mantenerse al menos a medio kilómetro de esas estructuras.
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