El perito forense Mauricio Cassinelli, comisario mayor y experto en la autopsia de Diego Armando Maradona, declaró ante el tribunal que el exfutbolista padeció una prolongada agonía antes de fallecer. Según sus hallazgos, el corazón de Maradona pesaba más del doble de lo normal y presentaba «un edema generalizado, de pies a cabeza».

Cassinelli, quien en aquel entonces dirigía Medicina Legal en la Superintendencia de la Policía Científica, detalló que el cuerpo del astro argentino acumulaba aproximadamente «cuatro litros y medio de agua», de los cuales tres estaban en el abdomen.

Hallazgos en el corazón de Maradona

Según medios internacionales, la autopsia reveló que Maradona padecía miocardiopatía dilatada, una afección que provoca el agrandamiento de las cavidades del corazón y dificulta el bombeo de sangre.

Además, se encontraron coágulos cruóricos, indicadores de que atravesó un periodo de agonía antes de su fallecimiento.

«Desde las 12:30 de la noche no recibía controles, con lo cual dijimos que podía haber tenido una agonía de hasta 12 horas», explicó Cassinelli.

Deterioro generalizado en sus órganos

Durante su testimonio, el perito mostró imágenes explícitas de la autopsia en una sala repleta de personas. Mientras señalaba el pulmón de Maradona, afirmó que estaba «todo grasa». También exhibió imágenes de sus riñones y los describió como afectados por «signos de nefroangioesclerosis». Además, confirmó que el exfutbolista padecía «cirrosis hepática».

Causa de la muerte

El informe final de la autopsia determinó que Maradona falleció el 25 de noviembre de 2020 debido a un “edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca crónica reagudizada”.

360°/AR/OBP