El empresario y multimillonario Elon Musk, quien en su momento respaldó activamente la campaña de Donald Trump y sus primeros meses en la Casa Blanca, ha marcado distancia con la administración estadounidense, especialmente en lo que respecta a su política arancelaria. Durante una intervención por videoconferencia en un acto organizado por el viceprimer ministro italiano Matteo Salvini, Musk expresó su firme oposición al incremento de los aranceles, y fue más allá al manifestar su deseo de que estos desaparezcan por completo.
«Espero que se acuerde que tanto Europa como Estados Unidos deberían avanzar, idealmente en mi opinión, hacia una situación de aranceles cero, creando efectivamente una zona de libre comercio entre Europa y América del Norte. Espero que Estados Unidos y Europa puedan establecer una asociación muy estrecha», señaló Musk, quien ha visto mermadas considerablemente sus finanzas desde que entraron en vigor las nuevas tarifas impuestas por Trump.
Solo su empresa de automóviles eléctricos, Tesla, ha experimentado una caída del 44% en su valoración bursátil, lo que equivale a una pérdida de 602.655,2 millones de dólares, desde que Trump asumió la presidencia de Estados Unidos.
Las declaraciones de Musk se producen pocos días después de que se anunciara su salida del recientemente creado Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE). Desde la Casa Blanca minimizaron su dimisión, asegurando que su salida ya estaba prevista desde el inicio.
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