El Gobierno portugués ha decidido prohibir el uso de teléfonos móviles en las aulas del primer y segundo ciclo de educación, equivalente a la primaria en España (de 6 a 12 años), en todos los centros del país, tanto públicos como privados. La medida entrará en vigor el próximo curso escolar y busca mejorar la convivencia escolar tras comprobar su eficacia durante este año académico.

Hasta ahora, cada colegio podía decidir libremente si permitía o no el uso de móviles. Sin embargo, los resultados positivos observados en los centros que los vetaron han llevado al Ejecutivo a unificar la norma. En estos colegios, los directores reportaron una notable reducción del acoso escolar, la indisciplina y las peleas, así como una mejora en la socialización entre los alumnos.

El año pasado, el Gobierno ya había emitido una serie de recomendaciones sobre el uso de móviles en las escuelas. Sugería una prohibición total hasta los 12 años y restricciones progresivas entre los 12 y 18. También proponía que, en los últimos cursos de secundaria, los estudiantes participaran en la elaboración de normas de uso.

En mayo, casi al cierre del curso, las autoridades encuestaron a los directores para conocer el impacto de esas recomendaciones. La mayoría coincidió en que eliminar los móviles del entorno escolar mejoró significativamente el ambiente en las aulas.

En España, la situación aún varía según la comunidad autónoma. Aun así, desde 2024 el Consejo Escolar del Estado aconseja vetar completamente el uso de móviles en primaria y limitarlo en secundaria solo a fines pedagógicos o médicos.

Con esta decisión, Portugal apuesta por un entorno escolar más sano y centrado en el bienestar y la interacción directa entre los estudiantes.

Fuente: El País

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