Un estudio reciente publicado en Harvard Dataverse, realizado por el investigador Yaakov Garb, muestra que la población en Gaza ha disminuido considerablemente.

Según las cifras del ejército israelí (IOF), la cantidad de habitantes en las tres principales «zonas humanitarias» (Ciudad de Gaza, Al-Mawasi y Gaza Central) pasó de 2.2 millones a solo 1.85 millones. Esto deja a unas 377,000 personas palestinas sin registrar en esas áreas y en riesgo.

Estas 377,000 personas no son simples números. Quedan en las zonas más afectadas: en el norte de Gaza, donde los bombardeos han sido más intensos; en Rafah, que la guerra ha destruido casi por completo; y en lugares sin comunicaciones, donde no hay forma de rastrear a las familias. También incluyen a personas asesinadas y a familias que quedaron enterradas bajo los escombros.

El estudio deja en evidencia la crisis humanitaria en Gaza y la difícil realidad que enfrentan quienes aún permanecen allí. La desaparición de estas personas muestra claramente que la guerra deja profundas heridas en toda la comunidad.

 

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