Donald Trump, parece estar reconsiderando su postura sobre los aranceles impuestos a China.

En una reciente rueda de prensa, Trump declaró a los periodistas en la Casa Blanca: «No quiero que suban más porque llega un punto en que la gente no compra».

Sus palabras sugieren una posible reducción de tarifas, ya que los consumidores podrían verse afectados por estos impuestos elevados.

Desde la imposición de aranceles del 10% el 2 de abril, los mercados han reaccionado de manera negativa, impulsando a Trump a retrasar la implementación de tasas más altas mientras se llevan a cabo negociaciones.

Aunque no confirmó conversaciones con el presidente chino, Xi Jinping, dejó entrever su interés en evitar un aumento significativo en las tarifas, que ya ascienden a un 145% tras las represalias de Pekín, que también aplicó aranceles de hasta el 125% sobre productos estadounidenses.

Fuente: Medios Internacionales

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