Ucrania lanzó un ataque contra una instalación de infraestructura energética en Kavkázskaya, en la región de Krasnodar, Rusia. Esta instalación se encarga del transbordo de petróleo desde vagones cisternas de ferrocarril al sistema de tuberías de la empresa internacional Consorcio del Oleoducto del Caspio. Según el Ministerio de Defensa de Rusia, la caída de uno de los drones causó un incendio en la zona.
El ataque, realizado con tres drones, ocurrió pocas horas después de la conversación entre el presidente ruso, Vladímir Putin, y su homólogo estadounidense, Donald Trump. Tras este diálogo, Putin decidió implementar un cese temporal de ataques contra la infraestructura energética. El ministerio de Defensa calificó el ataque como “otra provocación del régimen de Kiev” que busca frustrar las iniciativas de paz del presidente estadounidense.
El ministerio también informó que siete drones rusos esperaban realizar un ataque a instalaciones ucranianas en la provincia de Nikoláyev, pero Putin ordenó el cese de las acciones. Los drones rusos no pudieron atacar porque el sistema de defensa antiaérea derribó seis de ellos utilizando el sistema Pántsir. Un caza de las Fuerzas Aeroespaciales rusas neutralizó el séptimo.
Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, comentó sobre el ataque ucraniano y lo consideró un intento de sabotear los esfuerzos para resolver el conflicto. “La información sobre la orden del presidente de Rusia circulaba ampliamente en el momento de los ataques. El régimen de Kiev no hizo nada para cancelarlos, lo que va en contra de los esfuerzos comunes”, afirmó Peskov.
Peskov también destacó la incapacidad de Kiev para llegar a acuerdos y expresó preocupación por esta situación.
Fuente: VTV
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